martes, febrero 16, 2010

A good Tuesday

Esta ciudad trata bien a las mujeres solteras.

Hoy la pasé de pinga. Me fui de bares, bebí todo lo que quería y volví temprano a mi casa (¡claro, si empecé a las 5!). Además, me encontré a un amigo que tenía años sin ver.

El pobre Simón es, pero un desorden cuando toma, pero en realidad es un hombre buenísimo. Él me cuenta que la última vez que me vio yo estaba acompañada y pensó que yo tenía novio. Pero qué va. Ese lo que era era un buen mierda (aquél día yo andaba con la culebra). O sea, que intercambiamos teléfonos y nos juntaremos más adelante esta semana. Pero esta vez, honestidad ante todo. Lo primero que voy a hacer es poner las cosas claras, para que no haya malentendidos. Le diré lo que vi, lo que me molestó aquella vez... y a ver si se puede hacer algo.

Lo que yo más o menos recuerdo es que cuando lo empecé a tratar aquella era una relación súper lenta. Tan lenta que se murió de inanición (obvio, si nunca me dijo que yo le gustaba). Y al final ya era demasiado tarde. Pero bueno, es bello, fino y millonario, y en realidad nunca se ganó la categoría de HP. O sea que vale la pena intentarlo.

Porque vaya donde vaya, el mundo es redondo y da muchas vueltas.

4 comentarios:

¿y cómo lo ve usted que tiene lentes, doctor?