jueves, julio 23, 2009

Duke

Pues Lucy y yo siempre decimos que somos gemélas idénticas y nadie nos puede distinguir, como nacimos pegadas. Los más escépticos, engañados por su porte de mujer seria, elegante y ejecutiva, además de comedida, sopesada y parca en sus comentarios, no nos creen demasiado.

Pero qué va, esto es solo la coraza inicial. En realidad Lucy no sólo es idéntica a mí en un montón de cosas (ella admite que lo que le gusta es estar leventeando y sueña con las relaciones libres y sin complicaciones por sobre todas las cosas), sino que nunca deja de sorprenderme.

Hace una semana mi amigo Guido me estaba atacando para que conociera a un tipo amigo suyo. A mí me interesó el tema inmediatamente porque no hay un amigo de Guido que no me haya gustado hasta ahora. Literalmente me dijo lo siguiente: "quiero que lo conozcas, este tipo me gusta para tí, y yo nunca te había dicho que un tipo me gustaba para tí". ¿Se me olvidó decir que Guido se cree que es mi papá y me cuida muchísimo, aunque yo no necesite cuidado?.

O sea que, dicho y hecho, el viernes para la casa del Duke se ha dicho... allá me llevé yo arrastrada a Lucy. Pues el susodicho Guido prefirió su almohada y no nos dignó con su presencia, pero Duke, aparte de ser un tipo inteligentísimo, interesantísimo, cínico y argentino (con todo lo que esto implica), es un cocinero digno de las Mil y una noches.

Solo hubo un pequeñiiiiiiiiiiiiiiiiiiito problema. Cuando Lucy y yo llegamos, él tenía una ligera situación de emergencia con una hernia que lo tenía semi-inhabilitado. La historia de la hernia está aquí. Desde aquí todo fue cuesta abajo, nos despedimos y nos fuimos.

Cool. Al día siguiente me llama Duke, que se le explotó, que lo llevaron de emergencia para la clínica, que lo operaron, que está interno. Yo incluso me levanté temprano el domingo (¡TEMPRANO EL DOMINGO!) para llamarlo y saber si tenía que ir a la clínica a llevarle comida, bebida, cigarrillos, mujeres, libros, whatever.... pero le dieron de alta en la mañana.

Anyway, que cuando se lo cuento a Lucy ¿tú sabes lo que me contestó esa barbarasa? "¡Ay, pero qué bueno, parece que le hizo bien la visita de nosotras, porque le desencadenó la hernia y ya salió de eso!" O sea. Él nos dijo claramente que nació con ese asunto, que el seguro no lo cubre, que tenía que planificarse para hacerse esa operación cuando pudiera.

Quisiera yo saber en qué mente enferma puede caber que servir de catalizador para estrangularle una hernia inguinal a un pobre hombre --que estamos viendo por primera vez y ha sido tan amable de cocinarnos comida gourmet-- es una bendición.

On the bright side, mis conversaciones diarias con el susodicho Duke me tienen taaaaaaaaann entretenida que ya casi ni me he vuelto a acordar de Mario.

Duke, que te mejores y Long live the King!!!


PD.: O sea, ahora mismo estoy todavía chateando con él y tengo que tener un diccionario on-line abierto para traducir como la mitad de las palabras que él me dice.

1 comentario:

¿y cómo lo ve usted que tiene lentes, doctor?