miércoles, marzo 04, 2009

Límites

"If you consistently act out of a healthy level of self love for yourself, you will naturally have boundaries - we teach people how to treat us" NML. 10 Fundamental Lessons on Boundaries in Relationships. http://www.baggagereclaim.co.uk/

El domingo pasado, cuando Eduardo padre estaba aquí yo le preguntaba qué es lo que yo tengo que le envía a la gente el mensaje de que pueden pasarse de la raya conmigo. La lección más importante que nos enseñaban en el centro era poner límites, aprender esto cambió nuestras vidas y esta ha sido la semana para ejercerlo. Quizás deba ir a visitarla para ver por qué es que a mí todo el mundo me está viendo la cara de pendeja.

Parece ser que yo tengo un letrerito en la frente que dice: pisotéame.... ¡COÑO, porque tres veces en una semana está fuerte! La primera fue el miércoles. Me llama Christian como a la 1:30 de la mañana que está allá abajo y me quiere ver (o sea ¿y qué tú quieres que yo haga al respecto?). Le digo que todos los bares están cerrados y que la única manera sería si fuéramos a salir. Insiste que me quiere ver, le digo que entonces no tengo ninguna opción para él. Pregunta si puede subir, le explico que aquí está mi familia, mis hijos... pero eso es lo de menos ¡aunque yo viviera sola o fuera fin de semana, eso es mucho abuso, aparecerse como nada borracho y de madrugada sin haber sido invitado! Lo mejor del caso es que con este tipo yo no me he acostado (y dudo que lo haga, quizás bajo unas condiciones extremas de alcoholización, en cuyo caso al otro día voy a estar súper arrepentida y no voy a querer volver a hablarle, o sea, que no nos conviene a ninguno, además, es casado), nos hemos dado un par de besitos y hasta ahí llegó la cosa.

Pues el sábado me llama Marino, como es su costumbre, cerca de las 4 de la mañana. Después de como 1 hora en el teléfono me dice que ya va de camino para su casa y que me quiere ver. Le digo que claro que sí, cómo no, mañana. Me dice que no, que hoy, le digo que no, de ninguna manera, si quiere mañana, puede ser tan temprano como tú quieras, pero ahora yo estoy durmiendo. ¿Y qué tú vas a hacer si yo me aparezco en tu casa y me pongo a tocar hasta que tú me abras? (!!!!!!!!) ... con eso me salió. No te apures --le dije-- ya yo tengo experiencia en acosadores, no lo dudes que eso a mí no me quita el sueño.

Recuerdo mi estado mental el día que empecé el blog. Era un domingo y luego de salir de una relación de acoso telefónico y en vivo, persecución y maltrato psicológico con mi esposo me había empezado a relacionar con un tipo que me gustaba cantidad pero se veía que era un poco absorbente, y en el interín había conocido a media docena de acosadores a quienes ya no les contestaba el teléfono. Empezar a escribir fue en cierto modo una forma de desahogarme de los que trataban de asfixiarme.

Pues el tercer caso de la semana pasada no me molestó porque era un invitado y porque no es un fresco.... o por lo menos eso quiero pensar yo. La realidad es que depende del cristal con que se mire. Mi amigo Frao trabaja a 3 cuadras de aquí, nos habíamos juntado la semana anterior para ir al cine y antes de eso, en San Valentín, amanecimos juntos hasta que nos interrumpió Axel. Pues Frao llegó a visitarme un rato el jueves (que era viernes cimarrón) luego del trabajo. Al rato dijo muy campante: "voy a leer" y se va para mi habitación dejándome en la sala con mis hijos, en menos de 3 minutos ya estaba roncando. Cuando se despertó de esta siesta, como a la 1 de la mañana cenó, se acomodó ¡y siguió durmiendo hasta la mañana siguiente! por lo menos yo tuve el buen juicio de sacarlo de mi cuarto. Me cuentan que en la mañana él se despertó, le hizo desayuno a los niños y luego se fue. En ese momento no me molestó, pero mirando ahora en perspectiva la invitación original fue literalmente esta: "cuando tú salgas de trabajar, pasa por aquí un rato para que nos bebamos un par de tragos". O sea. Llegó a las 5:30 de la tarde y duró "un rato" hasta la mañana siguiente.

Ahora díganme si es que a mí se me ve en la cara que me pueden joder o algo por el estilo. Increíble. Hace solo 20 minutos que estaba hablando por teléfono con un amigo y me decía que cuando lo voy a invitar a mi casa, le dije que puede venir de visita cuando quiera, eso no es problema. Luego pregunta ¿y a dormir?.... le contesté que me diga si él lo dice en serio, para trancar el teléfono inmediatamente y hacer una cita pero ya con mi psicóloga... tanto que se afanó ella en enseñarme! ¿es que yo solo me topo con abusadores o es que no estoy entrenada todavía para vivir en el siglo 21?

1 comentario:

  1. Mmmmm, si vas donde la psicologa ella te dira:: Que tienen esos abusadores en comun??? Y la respuesta sera:: TU

    En resumen, escoge mejor con quienes te juntas, a quienes le das entrada a tu vida y ponle el signo de STOP a los que de antemano sabes que seran abusadores...Al igual que hacer un "recorte" de los que ya tienes...esa es mi humildisima opinion.

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¿y cómo lo ve usted que tiene lentes, doctor?