Semana Santa fue nuestra semana aniversario. Mi familia cumplió un mes ("mesiversario") de nuestra adquisición más reciente e inversión más rentable de los últimos años: un Duke.
Y como todo muchacho con juguete nuevo, se la pasan matándose para usarlo... ha sido divertido. Los muchachos están felices y yo más todavía.
Lo que siempre queda pendiente por saberse es si el juguete es de buena calidad. Si es así, los años de uso no le harán mella, las pilas no se le acaban nunca y el maltrato solo le saca brillo... pero no lo rompe. Yo, por mi parte, ya tengo mi respuesta. Solo es esperar que el tiempo y el uso me lo confirmen.
dale su mantenimiento a tiempo y veras que durara todo una vida...
ResponderEliminarAnimo que se puede.
ResponderEliminarTen fe y disfrutalo, lo que ha de llegar, llegará y punto.
Se les quiereeeee.
Como dice Pablo, dale su mantenimiento para que siempre este funcionando a la perfeccion y llenando por ende, las espectativas trazadas!
ResponderEliminarEn hora buena!