Ya yo había designado enfáticamente al 2009 como el mejor año, pero 2010 va rápidamente pisándole los talones.
Julio se ha dado grande. El 16 hizo un año del día en que me presentaron al Duke por este mismo medio. Y el 25, día de los padres, un año de la primera vez que salimos solos, juntos. Ese día él me dijo que yo le gustaba y me besó. Si no hubiéramos seguido juntos, esa salida no significaría nada, pero desde aquél día jamás nos hemos separado. En la casa y en la cama las cosas van todavía mejor que la última vez, si es que esto es posible.
Pero esa no es la mejor parte.
Resulta que yo terminé la carrera hace ya 11 años y desde entonces en adelante mi pareja de tesis y yo hemos tenido todos los inconvenientes que una persona puede tener para presentar la tesis. Una de las veces, por ejemplo, se metieron a mi casa y se robaron la computadora con toda la información adentro y hubo que volverla a hacer. Varias veces se perdieron los datos por muerte súbita del disco duro. Se incluyen en el proceso varios matrimonios, varios divorcios y varios hijos.
Hasta un día. En el 2006 decidimos hacer lo que hubiera que hacer para terminar esa vaina. Metimos cuatro escritorios y cuatro computadoras en la sala de mi casa, conseguimos un par de estudiantes para trabajar en el dibujo de los planos y un diseñador gráfico para completar la diagramación del libro y terminamos cinco meses más tarde con 11 bellísimos libros completos, impresos y encuadernados.
Empezó el 2007 y solo faltaba lo más simple: el 3D. Es reglamentario presentar los proyectos con algún tipo de vista tridimensional, sea maqueta o perspectivas. Rápidamente descartamos la maqueta por old-fashioned y contratamos a un amigo llamado Rico para hacer el 3D. Tres años y 20,000 pesos más tarde, después de morirse el papá de Gina que le había suplicado que no lo dejara morir sin verla graduarse, luego de una infección en los cojones de Rico, un internamiento de un año para la computadora y un divorcio en que la esposa se quedó con todo, mi pareja de tesis Gina tomó una decisión ejecutiva: dar por perdido el dinero que se le había entregado y buscar a otra persona. Total, él no había hecho una sola raya.
Entonces me avisó Gina que se va del país a finales de julio a vivir a Mexico, y que si no terminamos ahora, ya no terminamos nunca.
Entonces dimos con Vladi, un viejo compañero de la uni. La persona más responsable, más inteligente y más puntual de la bolita del mundo. Hubo que pagarle el doble, pero Dios siempre provee. Un sábado hace ya 2 semanas llegó a mi casa y me entregó el trabajo terminado y 15 vistas para elegir. El lunes siguiente llevamos los libros a la facultad, nos pusieron fecha de presentación y el lunes 26 a las 4 de la tarde y por intercesión de la Santísima Virgen, por fin me libero de la carga que ha mortificado a mi mamá por los últimos 11 años.
De ahí a la graduación es sólo dinero y burocracia... definitivamente, no ha habido un mejor mes!!!
Felicidades! en hora buena!
ResponderEliminarBravooooo Kia
ResponderEliminarBien por tiiiiiiii
Kia, me siento muy feliz por ti, te deseo muy buena suerte y exitos!!! Un abrazo!!!
ResponderEliminarLucy